Nuestra formación

Nuestra formación

La formación de los Siervos de Jesús, bajo la paternidad espiritual de san Ignacio de Loyola, busca acompañar y estimular al aspirante en el seguimiento de Cristo mediante la profesión de los consejos evangélicos: pobreza, castidad y obediencia.

A imitación de san Juan, el primado del servicio por amor es el espíritu que anima nuestra formación y misión.

Itinerario de formación

El itinerario de formación consta de postulantado, noviciado y los estudios de Filosofía y Teología, que incluyen un período largo dedicado al apostolado.

Después, algunos miembros son destinados a una formación especializada, según las condiciones personales y las necesidades del Instituto. Se realiza la profesión religiosa y, al terminar los estudios, se recibe la ordenación sacerdotal. Además, cada Siervo de Jesús continúa su formación a lo largo de toda su vida religiosa.

Itinerario formativo de un Siervo de Jesús

Cada etapa también favorece una inteligencia espiritual y teológica desde la Palabra de Dios, que interesa no solo para la labor sacerdotal, sino que debe tocar toda su existencia.

No se trata de seguir un currículum para obtener un título, sino de verificar durante este tiempo si efectivamente este camino es la voluntad de Dios, si el candidato encuentra cada vez más al Señor Jesús vivo y si puede servirlo toda la vida según el modo evangélico.

Los Ejercicios Espirituales en nuestra formación

Los Ejercicios Espirituales ignacianos son el marco fundamental de referencia. Ellos configuran los cursos, las actividades, el modo de vivir, el apostolado, la educación afectiva, las renuncias, en fin, el espíritu de los consejos evangélicos. Los Ejercicios suponen un contacto directo «del Creador con su creatura» (EE 15) y requieren una escucha atenta de esta acción divina en cada uno para seguir su impulso y así «más amarle y seguirle» (EE 104).

Colaboradores en la formación

El sostenimiento de la formación de nuestros religiosos es una tarea primordial para nosotros. Por esta razón, agradecemos a aquellas familias, amigos y colaboradores que ayudan a que nuestros estudiantes continúen su camino formativo. En especial agradecemos a los colaboradores institucionales cuyo soporte ha sido invaluable:

Fundación Carmen Gandarias
Fundación Ignacio Larramendi - Centenario