Nuestro Fundador

Nuestro Fundador

José Manuel Pereda Crespo nace el 2 de diciembre de 1943, en la ciudad de Tampico (México). Cursa sus estudios elementales en el Instituto Patria en la Ciudad de México. Ingresa a la Facultad de Medicina de la UNAM, donde participa activamente en el movimiento político que entonces se vivía en la universidad. En 1968 es privado de su libertad, permaneciendo seis meses en prisión; allí inicia su búsqueda de la voluntad de Dios.

 

Comienzos

El 25 de enero de 1971, siendo aún laico, encabeza la fundación de los Cruzados de Cristo Rey, que tiempo después serían constituidos canónicamente como Sociedad de Vida Apostólica.

Realiza estudios filosóficos en la Universidad La Salle. Posteriormente se matricula en el Instituto Superior de Estudios Teológicos San Ildefonso en España. El 20 de septiembre de 1984 recibe la Ordenación Presbiteral en la insigne Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe, en la Ciudad de México. A partir de entonces sirve a los miembros de la Sociedad buscando la voluntad de Dios bajo la premisa «Ama y Sirve».

 

«¿Por qué Cruzados?»

En el año de 1997, durante una cena en el Vaticano, San Juan Pablo II le pregunta extrañado: «¿Por qué Cruzados?», implicando las connotaciones negativas de ese título. Reflexionando sobre su respuesta a la defensiva, nuestro fundador comienza a reconocer la soberbia de fondo en muchos de sus planteamientos y la necesidad de una profunda conversión personal e institucional.

En 1999 realiza el mes de Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola. A partir de entonces inicia un proceso de purificación de intención y de oración constante.

 

 

P. José Pereda saludando a san Juan Pablo II.

Nuevo comienzo

En el Capítulo General de 2002 exhorta a los miembros de la Sociedad a pedir la gracia de vivir en «actitud de confesión», predicando intensamente la Misericordia Divina. Propone adoptar formalmente la espiritualidad de San Ignacio –que ha acompañado nuestra historia desde sus comienzos– y abandonar el nombre de Cruzados de Cristo Rey, sustituyéndolo por un nombre que acentúe el servicio a nuestro Señor.

El Capítulo General aprobó por amplísima mayoría los cambios propuestos. Nuestro fundador escogió como nuevo nombre Siervos de Jesús, el cual es nuestro nombre oficial desde el 31 de julio de 2003.

Algunos miembros no aceptaron los cambios y, desligándose del fundador y Superior General, y de las demás autoridades internas, decidieron continuar como Cruzados de Cristo Rey. Al haber rechazado las decisiones del Capítulo General tuvieron que realizar otro y elegir un superior.

Actualidad

Nuestro fundador prosigue el discernimiento de la voluntad Divina. En el Capítulo General Extraordinario celebrado en enero de 2006 renuncia al cargo de Superior General de los Siervos de Jesús para dedicarse plenamente a la oración y a dar Ejercicios Espirituales.

El 23 de marzo de 2009 el P. Francisco Javier Almanza Terrazas, S. de J., segundo Superior General de los Siervos de Jesús, erigió la Casa de Oración de la Santísima Trinidad, sede del núcleo contemplativo de los Siervos de Jesús. El P. José Manuel Pereda Crespo, S. de J. quedó como primer superior de la misma, desempeñando el cargo hasta el año 2023.

El P. José Manuel Pereda Crespo, S. de J. también es fundador de la Asociación de Fieles Virgo Fidelis.